Hoy lunes es un día clave para las redes sociales. Mike Massimino, especialista en misiones de la NASA, parte al espacio a las 6:01 p.m. (hora de EE.UU, 14:01 de Lima) llevando consigo una cuenta creada en Twitter hace más de un mes. Massimino ha prometido twittear desde el espacio como lo ha venido haciendo desde el 3 de abril. Hasta la noche del domingo tenía 205.106 seguidores de diversas partes del mundo y 117 textos publicados. El último decía: "Seguiré twitteando cuando pueda al entrar en órbita, pero no será por mucho. Síganos después del lanzamiento en NASA TV y en NASA Twitter".
Mike escribía diariamente en su cuenta dando información sobre cómo se preparaba para viajar al espacio como tripulante de la misión STS-125. Es su segundo viaje (el primero lo hizo el 2002) pero esta vez apeló a Twitter para contar a sus seguidores la compleja preparación que reciben los astronautas antes de volar.
Los trabajos de inmersión sobre una piscina (que simulan la falta de gravedad en el espacio) son sumamente agotadores. El astronauta de origen peruano, Carlos Noriega, me contó alguna vez sobre esta compleja etapa de su preparación para las caminatas espaciales cuando en 1997 tuve la ocasión de viajar como enviado especial al Centro Espacial Houston, en Texas.
Internet recién comenzaba a popularizarse en el mundo. La NASA lo empleaba para comunicar los trabajos de sus astronautas y compartía por esos años mucha información en su sitio web. Pero pocos colegas aprovechaban por ese entonces la abundante información científica que se divulgaba diariamente. Uno revisaba el sitio web de esos años y podía conocer en minutos las actividades diarias de los astronautas en el espacio.
Internet recién comenzaba a popularizarse en el mundo. La NASA lo empleaba para comunicar los trabajos de sus astronautas y compartía por esos años mucha información en su sitio web. Pero pocos colegas aprovechaban por ese entonces la abundante información científica que se divulgaba diariamente. Uno revisaba el sitio web de esos años y podía conocer en minutos las actividades diarias de los astronautas en el espacio.
Hoy los tiempos han cambiado. La conezión a Internet se hace a mayor velocidad, la multimedia está presente para todos y la Web 2.0 ha traído toda una impresionante cantidad de herramientas que facilitan la generación de contenidos.
Massimino supo recoger una de estas aplicaciones para crear expectativa en torno a su viaje a través de breves textos de 140 caracteres. Su estrategia de comunicación le permitió llegar de forma directa a más de medio millón de personas. Otro astronauta, Mark Polansky, también miembro de la misión STS-125, siguió el ejemplo de Massimino. Desde el 7 de mayo está presente en Twitter con textos personales en los que por ejemplo cuenta coo al inicio le costaba entender el uso de esta herramienta. En su último mensaje del domingo, Polansky decía a sus 3.829 seguidores que esperaba un lanzamiento seguro y exitoso.
La Nasa no se ha quedado atrás y también tiene una cuenta sumamente activa en Twitter (@twitter) pero no ha logrado acercarse a las cifras de Massimino. Tiene 38.087 seguidores y 2.642 textos. Esto significa que no siempre la abundante información institucional puede salir airosa en este escenario. La experiencia y los comentarios personales atraen mucho a las personas. Pero lo que más importa a los usuarios es saber quién está detrás de cada texto publicado, qué asuntos revela y cómo los comparte.
Christian Meier es un ejemplo local interesante. Con la ayuda de su Blackberry y su laptop va ganando diariamente decenas de usuarios. Se acerca a la cifra de 1.000 seguidores y con seguridad llegará a superarla dada su gran popularidad. Estos casos demuestran cómo la tecnología se va acercando paulatinamente a la vida diaria de las personas. Obama ayudó indirectamente a la empresa canadiense RIM a popularizar el Blackberry. Lo hizo al mostrarse con este dispositivo en sus actividades diarias y al reclamar luego por los intentos gubernamentales de eliminar su uso.
Massimino y Polansky la tienen más fácil. Se les autorizó divulgar contenidos a título personal. Y juntos han ayudado a que la NASA esté más cerca de la gente. Creo que la popularidad de Twitter aumentará como la espuma cuando Massimino y Polansky comiencen a enviar sus mensajes desde el espacio. ¿Estará Twitter preparado para soportar tal cantidad de usuarios? Ya sabemos que algunas veces el sitio web cae. Solo resta esperar cómo se inicia esta nueva etapa de la era Twitter desde el espacio.
1 comentarios:
es verdad que el twitter desplazará al blog?
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